El lunes pasado Deportes Quindío dejó pasar una clara oportunidad de meterse al grupo de los ocho al igualar en el estadio de Techo con Bogotá F.C, uno de los coleros que presenta el campeonato de ascenso en Colombia.
Por: Cristian Marín Zuluaga
Los cafeteros tuvieron la fortuna de jugar con varios resultados generados en diferentes plazas a su favor, sin embargo no se tuvo la jerarquía por parte de los jugadores para sacar los tres puntos en su visita a la capital.
El elenco cuyabro parece condenado a sostenerse en la novena posición, plaza en la que se empotró desde hace varias jornadas y la cual no ha podido soltar, sea por no sumar o por la intensidad de los conjuntos que se encuentran en la orilla de la clasificación.
Con esta ya son dos las ocasiones claras que ha tenido el equipo para lanzarse hacia los ocho. Al equipo le sigue faltando personalidad cuando la presión y la necesidad a parecen en momentos determinantes, donde se juega su prolongación en el torneo.
Lo acontecido el lunes es un golpe, casi mortal a la aspiración de la escuadra conducida por Prince, Bogotá era el rival de menos calibre en lo que resta del calendario. De ahí nacía la obligación de ganar para estar un poco más tranquilo en la tabla de posiciones, y más que eso, los tres puntos brindaban la serenidad de no estar pendiente de los demás equipos.
Lo que está por venir
Lo que resta de la fase regular es espinoso, Quindío tiene un camino rocoso si la intención de calificar para estar en el grupo de privilegiados. Ahora la planificación debe ser más intensa, el compromiso y la exigencia son puntos determinantes que requiere el plantel para obtener la licencia en los ocho.
Si preocupa la debilidad en episodios cumbres. En Bogotá el equipo empató, pero no era el resultado esperado. En los cuadrangulares inventados por Dimayor, no se jugó mal, pero no se consiguió el objetivo. Y hablar de Jaguares en la final del año pasado es un recuerdo que lastima, de igual manera, esa tarde en Montería el club fue timorato y se despilfarró la inmensa oportunidad de volver a primera.
Quindío pierde la posición con Unión Magdalena por diferencia de gol, ambos cuentan con 42 puntos. Entre tanto el cafetero se pone a dos de Fortaleza. Ahora, el lunes el contrincante es el coloso de la categoría, América de Cali, rival de peso que viene recuperando terreno. Será vital el triunfo en casa para seguir con aspiraciones, pero es evidente que de momento el conjunto de Armenia vive ligado a los registros de los demás equipos, muy duro.
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