DATA_ART_581918_BIG_CEAunque a pesar de algunos intentos por parte de la Secretaría de Gobierno municipal y de las autoridades por controlar o minimizar las ventas informales y ambulantes que atestan las calles de Armenia, cada día esta situación se presenta con mayor intensidad, mucho más cuando recién iniciamos una de las épocas de más movimiento comercial del año.

Por: Andrés F. Zapata

Y es que la problemática de la invasión de las calles pareciera nunca acabar, y muy por el contrario sigue creciendo sin ningún control por parte de los responsables, quienes ven como se sale de sus manos la capacidad para hacer respetar las leyes e imponer la autoridad sobre todas estas personas que pretenden hacer lo que ellos gustan.

Es muy claro que la situación de extrema pobreza y el elevado índice de desempleo, obliga a que muchas familias o ciudadanos recurran a prácticas informales como estas, pues de algún modo tienen que encontrar la manera de subsistir, pero tampoco nos podemos ver sometidos el resto de ciudadanía a que nuestra ciudad, en especial la zona céntrica, se convierta toda en un caos por la invasión desmesurada.

Según la misma alcaldía de Armenia, se supone que ya se dio inicio a estrategias en conjunto con la Policía Nacional para controlar el espacio público en la temporada navideña, pero realmente esta es una situación que difícilmente se podrá corregir de un momento para otro, máxime cuando esta época es el tiempo preciso para el gran auge comercial.

Es inevitable sentir algo de apatía y desazón ver muchas de las más importantes calles del centro de Armenia completamente ocupadas o asaltadas por estos comerciantes, que aunque sabemos en algunos casos son familias enteras que realmente tienen su negocito como pilar principal de empleo, ya que gracias a esto pueden vivir y comer, es también reprochable y completamente cuestionable el hecho de que la corrupción y la mafia están perpetrando estos negocios, siendo controlados por personajes siniestros que como siempre, buscan sacar provecho de todo para por medio de artimañas ilegales crear una mafia del comercio informal en Armenia.

La alcaldía de Armenia, está obligada a imponer control y hacer valer su autoridad, castigando y penalizando a los infractores, para de este modo recuperar las vías tanto para peatones como conductores. Lógicamente que la solución es crear espacios en donde se puedan ubicar a estas personas, tampoco pretendemos desterrarlos y evitar que continúen con su labor comercial como su único ingreso económico, pero tampoco podemos perder un espacio que se supone es de todos.

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