Con relación al seguimiento que hemos venido haciéndole a los diferentes líderes sociales de cada comuna de nuestra ciudad, nos hemos topado esta vez con una señora, que a pesar de ser ama de casa, conoce y entiende a la perfección de su comuna, la numero 4 de Armenia, las problemáticas que más aquejan a los más de 22 barrios que la integran y en donde utiliza su buena oratoria y liderazgo, para luchar por lo que ella considera más importante, el bienestar de los niños y jóvenes.  

Por: Andrés F. Zapata

Sin título-1La comuna 4 de Armenia, ubicada al sur occidente de la capital quindiana, a pesar de ser una de las más pequeñas de la ciudad, puesto que cuenta aproximadamente con solo 22 barrios y es poblada actualmente por un poco más de 17.000 habitantes, la gran mayoría pertenecientes al estrato uno, cuenta con sectores sumamente importantes y de crecimiento industrial y económico para la ciudad, así mismo es atravesada por las carreras 18 y 19, las consideradas vías de mayor flujo vehicular y de mayor importancia para la movilidad de personas con fines laborales, ya que estas carreras, en especial la 18, comunica al sur, con la zona centro, la cual es por excelencia, la de mayor albergue de empresas de la urbe.

La señora Libia Hincapie, edil de esta comuna, nos atendió en el barrio Obrero, donde reside actualmente. Allí, nos contó acerca de las mayores problemáticas que en general vive su comuna y algunas situaciones aisladas que se presentan en algunos de los barrios, así como de lo que ella, como líder social está gestionando para su comunidad con la alcaldía municipal.

Especialmente sus esfuerzos los dirige permanentemente hacia la intervención, educación, reintegración social y regeneración de niños y jóvenes vulnerables a estar inmiscuidos en las problemáticas que azotan la ciudad o que precisamente ya han tenido algún tipo de contacto con la delincuencia, la drogadicción, sicariato y microtráfico, principalmente. En palabras de la señora Libia, “la lucha hay que hacerla en pro de los niños y jóvenes, porque a los adultos, ya no hay quien los cambie”. Es por esto, que por medio del sacrificio y trabajo conjunto de varios líderes comunales, han logrado por parte de la administración municipal o algunos políticos, un poco de apoyo para la implementación de zonas deportivas, entrega de algunos instrumentos musicales y campañas para la recreación e integración cultural.

Todas las actividades que tengan como propósito vincular, entretener, educar, formar y  concientizar a la población infantil, son de extrema necesidad y urgencia, puesto que únicamente de esta forma se logra combatir que estos mismos niños en un futuro, opten por un arma, en vez de un libro o un instrumento musical.

La comunidad nos cuenta sus problemas

Aunque se han logrado algunos recursos que han sido destinados para el beneficio de niños y jóvenes de la comuna 4, aún falta muchas cosas por hacer, mayor intervención por parte de los políticos de turno, quienes según algunos habitantes de diferentes barrios de esta localidad, “solo se arriman durante el tiempo de las campañas electorales, se “untan de pueblo” y se solidarizan con nuestras situaciones, se muestran interesados por cada uno de nuestros problemas y prometen ayudarnos a solucionarlos, pero cuando son electos, jamás se vuelven a aparecer, y de aquello nada”, nos comentaba una habitante del barrio La Brasilia, el cual fue uno de los más perjudicados de Armenia durante el terremoto y aunque prácticamente se reconstruyó, aun cuenta con una cantidad de situaciones que necesitan ser atendidas.

En el barrio Santa Helena por ejemplo, según nos comentaban algunos residentes del sector, hay una situación incómoda con el alcantarillado, ya que por el mismo descuido y falta de sentido común de algunos habitantes irresponsables, han tenido la costumbre de botar la basura por estas alcantarillas, ocasionado que en tiempos de invierno, el agua no tenga por donde drenarse, inundándose obviamente varias calles, en especial una que comunica con El Belencito. Por este solo motivo existe un riesgo de salubridad que hay que controlar.

Otra situación se presenta en el barrio Miraflores Bajo, donde sus calles se encuentran en su gran mayoría, faltas de iluminación, siendo esto de suma preocupación, puesto que al ser un sector que limita con la denominada “cueva del humo”, es mucha más la peligrosidad que este factor desencadena en sus habitantes.

La delincuencia y el microtrafico, son las problemáticas que más preocupa a la comunidad, y a pesar de que unos barrios se ven más afectados que otros, esta es una situación que termina perjudicando a todos en general, ya que esto es un mal que se esparce como una plaga y de la cual no hay ningún control. Siendo precisamente la falta de control, uno de los más graves errores que comete la misma policía y las entidades del estado que se supone deben velar por la seguridad y por controlar este flagelo.

Barrios como el Santander, El Popular y el Santafé, son los reconocidos dentro de esta comuna como los de mayor registro delictivo y con presencia de pequeñas bandas dedicas al microtráfico, en donde familias enteras participan del accionar ilegal, comenzando por los niños, a quienes ponen como campaneros para avisar de la presencia de las autoridades.

Hay lugares por donde la policía ni siquiera entra por el peligro que esto conlleva, y como no son catalogadas como grandes ollas, entonces simplemente las dejan crecer y fortalecerse.

Según nos comentaba la edil Libia Hincapié, es necesario que los presidentes de los distintos barrios de la comuna 4 se integren y trabajen más en conjunto en pro de conseguir mayores recursos y soluciones a los diversos problemas que los aquejan. Y por parte de la administración municipal y entidades gubernamentales, mayor compromiso para cumplir a cabalidad con lo prometido.

Visitas: 0