Con el fin de consolidar el megaproyecto portuario de Tribugá, generando la vía de acceso desde el interior del país, se iniciaron las gestiones pertinentes para el proyecto férreo Quibdó – Nuquí, lo cual le proporcionará mayor desarrollo económico y comercial a los departamentos de la región cafetera.
El futuro de Manizales y Caldas, no sólo debe verse como avance de región sino en el desarrollo de la conexión con Valle del Cauca y Antioquia, pues se requiere de un corredor logístico que debe llevar implícito un aeropuerto y un puerto, es decir, un “corredor logístico competitivo”, recordando que en los mares se mueve el 90% de la economía mundial.
La Sociedad Promotora Arquímedes adelanta las gestiones necesarias ante el gobierno nacional, organismos ambientales, asociaciones de ingenieros e inversionistas, para hacer realidad la construcción del tren, como medio de transporte que facilite la puesta en marcha del puerto de aguas profundas en Tribugá.
Las fortalezas del tren Quibdó- Nuquí se centran básicamente en la integración de estrategias comerciales entre el eje cafetero, Antioquia, Santanderes, y altiplano cundiboyacense. Además, no produce efectos ambientales negativos. Mayor facilidad técnica y ambiental que el desarrollo de una carretera. Mayor capacidad de carga para el puerto.
Entre otras alternativa favorables están menores fletes en las cargas respecto de la carretera. Viabilidad financiera soportada en su incorporación dentro del Plan de Inversiones portuarias, avalada por la ANI y el transporte de carga hasta la costa y permite que de manera paralela se continúe con el proyecto vial Ánimas – Nuquí y su paralelo férreo.
Arquímedes realiza las gestiones pertinentes para promover y construir este medio de transporte, como eje apalancador para el puerto multimodal en el Océano Pacífico, en Nuquí, Chocó que sirva como terminal de transferencia.
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