20150120_194013Deportes Quindío tuvo tres oportunidades claras para clasificar y regresar a la categoría A. El equipo de Prince y Ángel fue inferior a ese reto. Primero perdió ante Jaguares, donde se vio en Montería un equipo entregado y sin ganas de triunfo, posteriormente fue ante Universidad Autónoma de Barranquilla, y anoche, aunque terminó invicto, el 3×3 no fue suficiente para vencer a Cúcuta Deportivo y  retornar a la primera categoría.

Al equipo le quedó pequeña esas tres grandes alternativas que tuvo en sus manos, fueron claras, evidentes y contundentes. En el fútbol colombiano jamás en la zona del descenso ningún equipo había tenido en sus manos tantas opciones, pero el cuadro cafetero fue inferior a esos retos e inclusive a la decisión de la Dimayor de acomodar dos cuadrangulares para regresar a la primera línea a dos de los equipos de sus afectos que ahora juegan el descenso.

Con un gol ilegitimo que no es disculpa y validado por el juez central, Deportes Quindío se ancló por un año más en la segunda división. Ángel con su poderío, no pudo retomar la condición con su equipo en la rama profesional.

Desde Bogotá el periodista Cristian Marín Zuluaga hizo la radiografía de lo sucedido futbolísticamente en el Metropolitano de Techo, veamos:
En pleno occidente de Bogotá, se daban cita los dos equipos de mayor regularidad durante la semana de cuadrangular, liguilla que reunía el propósito de dos grandes instituciones del fútbol colombiano como el Deportes Quindío y el Cúcuta Deportivo, dos equipos portadores de esperanza para sus hinchas, que anhelaban para el viaje escabroso por la segunda categoría.
El cuadro cafetero se presentaba para este crucial compromiso con bajas sensibles, Jairo Roy Castillo por sanción y Alexander Mosqueta por lesión, se movilizaban a la tribuna para alentar a sus compañeros ante el motilón.

El costado derecho de la grada occidental se teñía de verde, de ese verde de nuestra cordillera, de ese verde apacible que nos representa como destino turístico, sí, el Valle del Cócora.

Sin chapa

El milagroso llegaba sin chapa de favorito, la diferencia del gol beneficiaba al onceno fronterizo, obligando a los del “nano” a puntuar de a tres para respirar de nuevo en la primera categoría.

Desde un principio el roji-negro anunció su intención de apostarle a la pelota quieta, y fue ese mecanismo, sobre los 22 minutos del primer tiempo, el que le permitiría al Cúcuta mover la pizarra por intermedio del paraguayo Marco Lazaga, el atacante antes del gol se presentó en dos ocasiones sobre el arco de Ramos, dando un pre aviso.

Quindío no se reducía a pesar de estar en desventaja. El técnico cafetero tomó la iniciativa de mandar a la cancha a Giovanny López, jugador de buen pie. La variante rápidamente surtió efecto, el cuadro de Armenia se fue al frente y en una mano clara de Espinel en el área, encontró el lanzamiento desde el punto blanco, bien ejecutado por Galeano a los 34 del primer episodio. La tranquilidad volvía a deambular, aunque la igualdad no impulsaba al Quindío al ascenso.

Pero el Quindío motivado por la primera anotación, seguía insistiendo. A los 40 el balón fue al rincón, un tiro de esquina a favor del verde, levantado por López, permitiendo la feroz y espontánea aparición de Jainer Barreiro para voltear cinta y dejar el tanteador 2×1. La ilusión se alimentaba. Así llegaba el momento de descansar para reflexionar y pensar en un último suspiro electrizante.

Segunda fase

Y así fue. La epata complementaria estuvo llena de emociones. A los 22 Marco Lazaga vuelve a asomarse sobre el predio de Quindío para equilibrar las cargas. Esta vez apoyado por la terna arbitral, ya que increíblemente y antes sus barbas vieron como el guaraní mandaba la pelota al fondo con la ayuda de su mano derecha. Ulises Arrieta, juez central, fue advertido pero hizo caso omiso, validando un gol, que debió ser tiro indirecto en ataque para al Quindío.

De nuevo el balón parado fue el dolor de cabeza, Franco Sosa en una remate impecable a los 32 minutos, suministró el tiquete para el regreso inminente a la A del cuadro de la frontera.

A los 41 minutos Jainer Barreiro consiguió la paridad pero ya era tarde, dejando la pizarra igualada a tres.

Pero no pudo

Más con ganas que con orden táctico, Quindío enfrentó la segunda fase del juego, un gol ilegitimo validado por el central puso a Cúcuta a pensar en su clasificación, luego los motilones regresaron a la red cafetero dejando el 3×2 para que Quindío marcara el suspenso logrando la paridad ya sobre las postrimerías del compromiso. Los últimos minutos fueron de infarto, Quindío lo intentó pero no lo consiguió y el empate fue suficiente para que el onceno de la frontera asuma desde hoy el rol de equipo profesional.

Sin disculpas

Ya no caben las disculpas, Quindío con la derrota dejo escapar su tercera oportunidad para ascender pero fue muy inferior en esas tres grandes alternativas que le otorgó el futbol nacional. Ahora Hernando Ángel seguirá pensando en el litigio defendiendo lo que considera suyo mientras un juez de la república calificó al Deportes Quindío como patrimonio de la ciudad, no de él.

Visitas: 0