Ya estamos cerca de la próxima cita deportiva más importante en el país que será repartida en su sede entre el departamento de Tolima que albergará 31 disciplinas y el departamento del Chocó que tendrá en acción 16 modalidades deportivas, el conteo regresivo ha iniciado y aun vemos muy crudos a los atletas de la región para ser partícipes de esta justa.
No podemos desconocer el aporte del gobierno departamental hacia el deporte cafetero, se han intensificado los procesos de formación, se le ha apostado a las nuevas generaciones y podríamos decir que algunas ligas han sentido el respaldo, como otras no tanto.
Preocupa ostensiblemente el tiempo restante para una adecuada preparación hacia los juegos deportivos nacionales, como ha sido costumbre en la región, a última hora los deportistas del alto rendimiento en el departamento deberán doblegar sus esfuerzos para llegar en plenitud a la cita, pero para ello requieren mayores incentivos económicos, mayor acompañamiento financiero para los respectivos fogueos y por supuesto dinero suficiente para los suplementos nutricionales que son básicos en un atleta de alta competitividad.
Esperamos el espaldarazo decidido de las dos administraciones, de la Alcaldía y también de la Gobernación, y sobra recordarles que el deporte es un punto neurálgico para el desarrollo de la sociedad y para la consolidación de un proyecto político llevado a la urnas en campañas electorales.
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