POR: LUIS ELMER ARENAS PARRA

Ex Senador de la República

 

No sé en qué país vive o para que país trabaja este gobierno, que busca el muerto rio arriba en todas las reformas que presenta al Congreso.

Vale la pena mirar la historia antes de la vigencia de la ley 100 de 1.993, cuando la salud era manejada en los hospitales por el gobierno nacional y los gobiernos departamentales y locales, donde quien no tenía recursos se moría, y si lo atendían lo recibían en lo que llamaban de caridad en esas instituciones. Cuantos muertos además de este comportamiento causó en toda la historia la corrupción que hoy no ha cambiado, y los trabajadores que difícilmente se pensionaron, en su mayoría murieron sin que les pagaran ya que les abonaban a cuotas el sustento logrado durante tantos años de trabajo, situación similar ocurría con sus trabajadores, consecuencias que finalmente pagaba la población vulnerable.

La ley que nos rige hoy, si bien no es la panacea, obedece a estudios técnicos, después de recoger todas las inquietudes de los colombianos, y por lo menos con el régimen subsidiado, se atiende a la población más marginada y con el contributivo a quienes tienen la posibilidad de hacer los aportes, en una cobertura del 99.99%.

No señores del gobierno, recursos para salud, entregamos los colombianos de sobra, lo que tienen que evitar es que se los roben, por eso la única reforma válida, tiene que ver:

1. Eliminar la integración vertical, pues con ella se viola todos los principios de control interno, como ya ocurrió con SALUDCOOP y otras EPS que tienen sus propias clínicas, se autofacturan, en ocasiones sin prestar servicios médicos y se pagan, y de esta manera se roban los recursos, para hacer canchas de golf y clubes.

2. Implementar mecanismos para que los recursos sean manejados por el ADREES, desde luego con estrictos controles, y de acuerdo con las cuentas que cobren las EPS que no se deben acabar, se les cancele; más el porcentaje que se les otorgue por el manejo administrativo de la salud; por tanto, estas entidades no deben manejar los dineros de la salud, pues en auditoría si quien elabora la cuenta, es el mismo que la paga y adicionalmente el que maneja el dinero, es una clara oportunidad para robar. Es lo mismo que aquel dicho, de que el que escruta elige.

3. El manejo de la dirección de los hospitales debe someterse a concurso, para que quien ocupe el primer puesto sea el que lo administre con independencia; estas entidades manejadas por las gobernaciones y las alcaldías, se han convertido en la caja menor de algunos mandatarios, que ubican allí el corrupto para que robe y partan los recursos de la salud que aportamos los colombianos, sin contar que se han convertido en un fortín burocrático de politiqueros de turno.

4. Respecto al manejo de los recursos en el ADREES, se debe tener el máximo de atención al redactar la legislación, no sea que resulten abogados que hoy los funcionarios colocan cuando ya tienen los recursos para robarles como honorarios hasta el 40% de los recursos que deben pagar o prevalezca la extorsión a la EPS para poder cancelarle con recursos que sobradamente se tienen y que la corrupción impide gastarlos como son.

Con estas sencillas pildoritas que difícilmente aprueben en el congreso arreglamos el problema de la salud, por el contrario, con el proyecto del gobierno que vuelve a lo que se manejó antes de la vigencia de la ley 100, se fortalece la corrupción imperante que seguramente a pupitrazo limpio aprobará este congreso, contribuyendo a pauperrimisar al pueblo colombiano que es lo que desea el gobierno, pues ya lo ha dicho. Al pobre hay que mantenerlo pobre porque si sube de clase se vuelve de derecha, (HUGO CHAVEZ, PETRO.) ante todo, porque si sigue pobre, continúa votando por el bandido en agradecimiento por que le da una migaja, con recursos que no son de él, para cubrir el derecho que le corresponde y que no tiene por qué mendigar. 

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